En junio de 1960 se crea la Asociación Judicial Bonaerense como Sindicato único de los judiciales de la Provincia de Buenos Aires. Fue la síntesis y la unión entre dos agrupaciones de los judiciales bonaerenses de la década de 1950, el Sindicato Unión Judicial Bonaerense
y la entidad Civil Asociación Poder Judicial, una agrupaba a los judiciales y la otra a los funcionarios.
En 1985 la Asociación Judicial Bonaerense logra la personería gremial mediante resolución N° 1446/85 del Ministerio de Trabajo y Seguridad Social de la Nación, quien en los considerandos, manifiesta: ”…no existe en la zona de actuación peticionada otra entidad
con personería gremial que posea el mismo agrupamiento de la peticionante…” por ello RESUELVE: “Art. 1° Otorgar a la Asociación Judicial Bonaerense…. su personería gremial de primer grado y con zona de actuación en toda la Pcia. De Buenos Aires».
Conforme lo establece la Ley 23551 de Asociaciones Sindicales de Trabajadores, la Asociación Judicial Bonaerense acuerda su estatuto, cuya ultima modificación fuera aprobada con fecha 10 de septiembre de 2008, mediante resolución N° 996 del Ministerio de Trabajo Empleo y Seguridad Social. Estatuto este que en su articulo 1° establece: “….queda constituida la Asociación Judicial Bonaerense que agrupa al personal no jerarquizado del Poder Judicial Ministerio Publico y Consejo de la Magistratura de esta provincia, desde la categoría menor hasta la de Secretario de cualquier nivel, inclusive, cuya designación no requiera acuerdo del Senado. Tendrá como actuación el territorio de la Provincia de Buenos Aires constituyendo un Sindicato Único de carácter permanente…”
De esta apretada síntesis respecto a los antecedentes legales, así como de la histórica actuación de nuestro gremio, surge que la A.J.B. es el único sindicato legalmente constituido que tiene representación para discutir con el Poder Ejecutivo los salarios de sus representados y con la Suprema Corte de Justicia de la Pcia. de Buenos Aires sus condiciones laborales,
Según lo hace saber en sus comunicados, el Colegio de Magistrados mantiene reuniones secretas con integrantes de la Suprema Corte de Justicia de la Pcia. de Buenos Aires y el Poder Ejecutivo, respecto a cuestiones salariales no informan a sus asociados que se trata
en las mismas, cuales son los reclamos, cuando se llevan a cabo tales reuniones, pero lo que es peor, lo hace invocando la representación de Secretarios y Funcionarios, cuando esto resulta a todas luces ilegal, lo cual resulta vergonzoso proveniente de quien se supone que son los encargados a impartir Justicia y hacer cumplir las leyes.
A modo de ejemplo y poder establecer claramente quién representa a quién o a qué, es de hacer notar que fue la A.J.B. quien se reunió con Secretarios y Aux. Letrados y consiguió solucionar el conflicto sobre el solapamiento de sueldos generado entre tales categorías, que fuera generado por la gestión del Colegio de Magistrados. Que en las paritarias que se están desarrollando este año, también logramos evitar ese inconveniente. Que este gremio jamás intentó un aumento exclusivo para un sector, como sí lo hiciera el Colegio de Magistrados en diciembre último, donde se le otorgara un 3 o 4% de aumento exclusivamente a ellos, dejando afuera inclusive a los Secretarios que dice prohijar.
Resulta sumamente sospechoso que cuando se encuentra en trámite legislativo la Ley de Autarquía del Poder Judicial y tratando de acordar la Ley Marco de Paritarias, las que cambiarían fundamentalmente las relaciones laborales, este gremio viene sufriendo
ataques intentando dividir a nuestros representados, con comunicados falaces e intentos de creación de gremios paralelos con el único fin de hacerle perder poder en las negociaciones con el consecuente empeoramiento salarial y de las condiciones de trabajo, por que al único que le sirve tu debilidad es a tu enemigo.
El comunicado que emite la Comisión de Secretarios, Auxiliares Letrados y Funcionarios del Colegio de Magistrados el día 06 de marzo del corriente año, señalaba que ellos han participado de las negociaciones tanto con la Corte como con el Poder Ejecutivo en materia salarial y de condiciones laborales, los que nos lleva a hacer la denuncia correspondiente ante el Ministerio de Trabajo de la Nación, ya que como hemos dicho legalmente sólo puede realizarlo la AJB; Art. 2º del estatuto establece los objetivos de nuestra asociación: «… defender y representar los intereses gremiales individuales y colectivos de sus afiliados…»
Que si bien entendemos que la Ley de Autarquía es favorable, ante las posturas tomadas resulta evidente que lo que se intenta es tomar posicionamientos para obtener más beneficios para los que ya no pagan Impuesto al salario o cobran toda la antigüedad al 3%,
que cuando levantan la idea de la equiparación con Capital, ya se vislumbra a quien se intenta beneficiar, ya que esa equiparación sin ley porcentual, va a significar una mejora para pocos, y en esos pocos no están los funcionarios.
Resulta sorprendente ser tratados de “poco democráticos y de mentirosos” cuando la AJB comunica y discute con todos lostrabajadores en asambleas abiertas todas las propuestas salariales y discute en congresos provinciales la políticas gremiales a llevar a cabo y no creemos que si los afiliados conocen los términos de la negociación la harían fracasar.
Que cualquier afiliado en la AJB puede acceder a cargos dirigenciales, sin perjuicio del nivel que reviste. Que creemos en que la afiliación al gremio parte de una visión solidaria y en que solo la unidad otorga la fuerza necesaria para pelear por nuestros derechos y no desde la conveniencia personal o por acciones extorsivas de promesas, generalmente incumplidas, de conseguir cargos en la magistratura.
Cuando la sociedad toda, cuestiona fuertemente al Poder Judicial y requiere más y mejor representatividad, que demuestre su independencia y no que resulte títere de los poderes fácticos, ciertos sectores pretendan anquilosarse aún más y mantener una estructura anacrónica, lejana a las necesidades del pueblo.
Por todo lo dicho es que no queremos ceder la representación de ningún sector que hoy poseemos, porque sabemos que solo debilita al gremio y al sector, que nada impide a cualquier persona esté afiliada a la asociación civil sin fines de lucro que desee, pero de ningún modo ésta puede representarla gremialmente. No seamos funcionales a sectores que con cantos de sirenas intentan debilitarnos, sigamos, inclaudicablemente en busca de la unidad, y debatamos en el ámbito de la AJB nuestros reclamos sectoriales para lograr la defensa irrestricta de nuestros derechos y la obtención de nuestras mayores reivindicaciones, que no sólo benefician a un sector, sino que a todos los Trabajadores que componen el Poder Judicial de la Provincia de Buenos Aires.
