La Comisión Directiva de la Asociación Judicial Bonaerense Departamental Lomas de Zamora expresa su más enérgico repudio al accionar persecutorio que vienen sufriendo nuestras compañeras maestras del Jardín Maternal por parte de la Suprema Corte de Justicia cuyo único y claro objetivo es restringir el ejercicio a la actividad gremial. Esta serie de actos comenzaron con la intimación al personal docente para que no adhirieran al Paro Internacional de Mujeres del día 8 de marzo pasado, justamente una medida impulsada por un colectivo de mujeres con la motivación de visibilizar las dificultades que sufren las mujeres en el ejercicio de sus derechos y obligaciones. Frento a ello, ese mismo día y antes que comenzara la medida de fuerza, integrantes de la Comisión Departamental fueron convocados al jardín donde se acordó, luego de entrevistarse con la totalidad del personal, un plan de acción que contemplara los límites y grados de exposición de las mismas, como así también que priorizara la protección de ellas y no las fuerce a realizar medidas que no ven como correctas o convenientes. Al día siguiente, 9 de marzo, y de forma complementaria, nos entrevistamos con integrantes de Personal de la Corte, recibiendo como respuesta intentos de justificar este accionar y deslindar responsabilidades.
El día miércoles 15 de marzo, se suscede una nueva acción de amedrentamiento al requerirse informe que contemplara cuales eran las docentes que se adherirían a la medida de fuerza dispuesta por la Ajb, una medida que impulsaba la participación de los trabajadores y trabajadoras judiciales en la multitudinaria marcha que realizaramos conjuntamente con los docentes, estatales y profesionales de la salud.
Este conjunto de actos, altamente atentatorios contra el libre ejercicio de la actividad sindical, merece no solo el repudio y las acciones pertinentes por parte de esta Comisión, sino tambíen el más firme y genuino respaldo a las compañeras afectadas que les permita llevar adelante las medidas de fuerza, sin siquiera resultar necesario una guardia que cubra las urgencias. Es de hacer notar que semejante cosa no fue argüida por el Poder Ejecutivo, en la lucha que vienen llevando adelante los docentes, al resultar a todas luces insostenible.
Duele particularmente que dicha actitud represiva se dirija a las compañeras del jardín, institución que desde sus mas de veinticinco años de existencia y a través de todo el personal que cumpliera funciones en el mismo, ha logrado ganarse un profundo prestigio por la excelencia y dedicación hacia los chicos. Nuestras docentes merecen un gran cariño de los que enviamos a nuestros hijos, al sentir una ayuda en la crianza de los mismos, sabiendo que nos entienden y contienen.
Desde lo humano y más allá de lo gremial, todos los judiciales que hemos pasado por el jardín tanto como padres e inclusive como alumnos, solo tenemos palabras de agradecimiento.
Por todo lo dicho y sin perjuicio de las gestiones que llevaremos adelante como representantes gremiales ante la autoridad competente, invitamos a los padres de los chicos que actualmente concurren al jardín a la reflexión; en toda lucha resulta imprescindible la solidaridad, por lo cual, y como resulta histórico en esta departamental, cuando se anuncia una medida de fuerza, pedimos que no lleven a los chicos al jardín, para no poner a las maestras en la opción de luchar por sus derechos o rendirse a sus afectos.
