El sábado 9 de mayo, un centenar de peritos debatieron sobre las modalidades de trabajo y los desafíos impuestos al sector por el contexto de la pandemia del COVID-19.
Un gran interés suscitó en las y los profesionales la convocatoria realizada por la Comisión Provincial de Peritos de la AJB para debatir de manera virtual las “Modalidades de intervención durante el aislamiento, las características de la demanda y los tipos de respuestas a la misma”. Prueba de ello es que se llegó al límite de cien participantes impuesto por la plataforma de videoconferencias, quedando sin poder conectarse muchos y muchas peritos.
Durante más de cuatro horas, las y los peritos hicieron explícita la necesidad no sólo de compartir sus experiencias de trabajo en un contexto atípico marcado por la pandemia y el aislamiento social, sino también de construir colectivamente las respuestas que se dan a los requerimientos de jueces, fiscales y defensores.
Al respecto, Susana Cuadro, integrante de la Comisión de Peritos del sindicato, expresaba que “este es un momento de gran sensación de vulnerabilidad general por la situación de pandemia que estamos viviendo, y esto lo muestra la gran cantidad de peritos que se sumó a esta convocatoria virtual”.
“Una cuestión que quedó claramente evidenciada durante el encuentro es la desigualdad preexistente entre las y los peritos que desarrollan sus labores en el ámbito del Ministerio Público y las y los que trabajan en el ámbito de la Administración de Justicia, situación que enriqueció el debate, pero al mismo tiempo complejizó la posibilidad de unificar criterios de acción”, refirió Lucas Losa, también integrante de la Comisión.
Respecto de esto último, un caso paradigmático lo constituye el de las y los peritos de la Justicia de Paz, cuya situación particular se relaciona directamente con las características del organismo en el que trabajan y porque en la mayoría de los casos desarrollan sus tareas en soledad. Al respecto, desde las y los participantes, surgió la propuesta de realizar reuniones por fueros, en las que las y los peritos tengan más posibilidades de exponer sus problemáticas y llegar a conclusiones más específicas.
Qué constituye una urgencia y quién lo determina, fue un tema de debate importante a lo largo de la reunión. En relación a este tema, tal como fuera difundido en el comunicado de la Comisión de Peritos denominado “La intervención pericial durante la pandemia” (https://www.ajb.org.ar/la-intervencion-pericial-durante-la-pandemia/), el criterio de urgencia debe aplicarse a causas en las cuales se encuentren en juego la vida y/o la salud física o mental de niñas, niños y adolescentes, o personas víctimas de violencia, siempre y cuando no se puedan tomar las medidas de cuidado inmediato con los elementos existentes en el expediente. Asimismo, se definió que no sólo se puede, sino que se debe evaluar qué es urgente y qué no lo es, y fundamentar la posición privilegiando la prevención y protección de la salud y la vida.
Al respecto Gustavo Fernández, coordinador de la Comisión, señalaba que “Más que nunca se necesitan respuestas colectivas frente a la pandemia. Como peritos tenemos la obligación de dar esas respuestas que antepongan el cuidado de la salud propia y ajena, a requerimientos peligrosos o simplemente ordinarios, porque atravesamos tiempos extraordinarios”, mientras que Osvaldo Fernández Santos agregó que “las y los peritos debemos buscar las formas de cuidarnos y cuidar al otro sin perder la ternura ni el rigor científico”.
Otro tema de debate fue la modalidad en la que las y los peritos están desarrollando sus tareas en este contexto. En la mayoría de los casos lo hacen en forma no presencial –bajo la modalidad de guardias pasivas-, y en el caso de que deban intervenir lo hacen de forma remota. La modalidad del teletrabajo genera muchos interrogantes, fundamentalmente en cuanto a si esa intervención constituye o no una pericia. Al respecto, las y los peritos acordaron en no considerar pericia la intervención profesional que se realiza por vía remota, como así también en la necesidad de generar protocolos, consensos y encuadres que unifiquen los criterios de intervención.
En el mismo sentido, Alberto Agote, otro de los integrantes de la Comisión, refería que “Las y los peritos tenemos el derecho de elegir las técnicas y recursos adecuados para realizar la tarea que nos encomiendan, como así también a negarnos a realizarla cuando no estén dadas las condiciones necesarias de seguridad e higiene”.
“Este poder encontrarnos y escucharnos nos ha permitido repensar nuestra labor desde el aporte de las diferentes disciplinas, con las características de los distintos fueros y dependencias donde estamos insertos, con todas las variables que entran en juego a la hora de llevar a cabo nuestra intervención en esta emergencia. Han surgido propuestas sobre las que se seguirá profundizando, para dar una respuesta desde la construcción colectiva a las demandas de intervención, de manera consensuada, sin perder los marcos teóricos, el rol profesional, el cuidado y el sentido ético”, concluyó Érica Velasquez en referencia al encuentro, realizado por primera vez de manera virtual.
Por último, desde la Comisión de Peritos resaltaron la importancia de ante cualquier inconveniente comunicarse con el sindicato para informar la situación y consensuar alternativas de acción y de cuidado.
