En 1970 la AJB comenzó a recaudar fondos entre trabajadores judiciales, jueces y abogados vendiendo unas tarjetas exigían la libertad de Nelson Mandela. Recorriendo las oficinas o en las mesas de entradas de las dependencias judiciales, los compañeros que ofrecían esas tarjetas tenían que explicar que era el apartheid y quien era ese abogado sudafricano que hacía ya ocho años que estaba preso cumpliendo una condena a cadena perpetua. Nuestro gremio fue el único sindicato argentino que se hizo eco de aquella primera campaña mundial por la libertad de Mandela y el resto de los presos políticos en Sudáfrica. Debieron pasar veinte años más para lograr el objetivo.
Además de partidos de rugby, partidas de caza mayor, ferias y exposiciones, dentro de las actividades que buscaban acercar a ambos gobiernos con el explícito objetivo de impulsar el comercio bilateral y la posibilidad de firmar un acuerdo militar para constituir el Tratado del Atlántico Sur, desde el canal ATC, en 1980 Victor Sueiro le realizó una distendida e informal entrevista al embajador de Sudáfrica en Argentina y a su esposa. Después de una hora de hablar de las maravillas y virtudes, de la riqueza y seguridad, de la salvaje naturaleza y la modernidad urbanística de Sudáfrica, viendo el conductor que la mujer del embajador aún no había dicho ni una palabra, le preguntó: “¿Y cómo es la mujer sudafricana en comparación a la argentina?”. A lo que el embajador del apartheid contestó inmediatamente: “¡Más rubia, es realmente rubia!” y el programa terminó. Fueron años difíciles para nuestros pueblos, sobre todo para los mas pobres y los trabajadores.
“Siempre parece imposible hasta que se hace”, había dicho Mandela. Hoy, los genocidas argentinos están siendo juzgados y condenados por argentinos. Hoy, todos sabemos que Mandela a muerto y quien fue ese hombre.
Emilio Gorini
Congresal Titular
Asociación Judicial Bonaerense Lomas de Zamora